El Libro Rojo

El ser humano nació naturalmente coherente, no hay un niño menor de cinco años, que sea mentiroso o que sea hipócrita. Todos nacimos coherentes, con la capacidad de expresar lo que sentíamos en el momento que lo sentíamos, de hacer lo que queríamos en el momento que queríamos hacerlo y de decir lo que pensábamos en cada escenario que habitábamos.No obstante, en la medida en que fuimos creciendo, fuimos incorporando lo que esta cultura nos enseñó que fue mentir, evadir, enmascarar, ocultar y por supuesto lo que fuimos per- diendo a medida que fuimos creciendo, fue la estructura de coherencia.Crecimos siendo luchadores, porque nuestros padres solo nos premiaban cuando veían nuestros esfuerzos, con el tiempo fuimos construyendo nuestras propias creencias y paradigmas volviéndonos guerreros, porque dadas nuestras creencias nos íbamos por el mundo con espada, escudo y armadura a defen- derlas, puesto que estábamos seguros que eso era lo correcto y de que así era el mundo.Dada esa consciencia ciega, fuimos creciendo y a medida que fuimos incorporando nuevas maneras de interpretar el mundo, pasamos de guerreros a ser buscadores; buscadores de la fe, buscadores del conocimiento, buscadores del amor, busca- dores de la verdad; y entonces nos llenamos de información, libros, títulos, y entrenamientos de crecimiento personal, hasta ir aumentando poco a poco nuestro nivel de consciencia para finalmente dejar de ser buscadores y transformarnos en apren- dices.Cuando eres un guerrero siempre tendrás que luchar, cuando eres un buscador siempre tendrás que buscar y cuando eres aprendiz siempre tendrás algo que aprender. Cuando ya hemos elevado nuestro nivel de consciencia, a lo más profundo por-que ya no es alto, es profundo y cuando vamos a lo más pro- fundo de la consciencia, lo que encontramos es inocencia.El inocente no hace juicios, no interpreta, simplemente vive en plenitud, no hay ruido mental, emocional, está aquí y ahora gozando y convirtiendo el conocimiento en acción.Para recuperar nuestra estructura de coherencia, el camino es volver a ser niños. No hay nada más sabio que esto, porque al final lo que va a primar, es el bienestar, la felicidad y la auto- rrealización.Hola, soy Alberto Pierotti: aprendiz, escritor, empresario, místi- co y biocoach para miles de personas.Por más de 30 años me he dedicado a la búsqueda y aprendiza- je de las técnicas más secretas y avanzadas para el desarrollo y dominio del potencial humano, y ha mostrar el camino para que las personas alcancen su alegría natural y puedan vivir la vida con la experiencia de su propia naturaleza interna.He experimentado la vida con alegría y compasión y con un enfoque científico hacia la espiritualidad, en una única misión:“Acompañar la construcción de un mejor ser humano”.Sin pertenecer a ninguna tradición particular, incorporo desde las ciencias espirituales lo que es más válido para las personas.Mi causa: El Bienestar Natural, que encuentra expresión en la forma de un ofrecimiento incesante para apoyar a todos los seres humanos.Disponible para las personas que lo deseen, es una invitación a lo que es elevado a través de la transformación individual.A la revolución silenciosa de la autorrealización, a la que llamo:

ARQUITECTURA INTERIOR : EL CÓDIGO DE LA CONCIENCIA