El Churro Ilustrado : ¡OTRO TEBEO SOBRE LA GUERRA CIVIL!
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En el día de hoy, cautivo y desarmado el ejército churrero, han alcanzado las tropas editoriales sus últimos objetivos humorísticos. El Churro se ha terminado.
Hace ya 80 años que España se fue a la cama con el Franquismo. “Esto no es lo que parece”, exclamó al ser sorprendida por la República. Menudo golpe se llevó la pobre.
El 1 de abril del 1939 finalizaba la guerra civil española. Joaquín Sabina se quejaba de que le habían robado el mes de abril, pero a los españoles nos robaron casi cuarenta años desde ese abril.
España acabó cayendo tras el alzamiento cuando pasaron los que no pasarían lanzando vivas a la muerte.
Eran otros tiempos: la campechanía monárquica era campo y la república no era un animal mitológico. Seguramente que si hoy cantamos “¡Rumba la rumba la rum bam bam!” algunos pensarán que es una canción de Peret y otros la BSO del robot aspirador.
Sin embargo, parece que hoy a muchos se les siguen yendo los pies con el ‘Cara al sol’ y levantan el brazo sin intención de parar ningún taxi. Se ve el protoexhumadísimo que lo dejó todo tan atado y bien atado que ahora ya no hay manera de deshacer el nudo.
Y la izquierda sigue tan desunida como entonces, subdividiéndose en pequeñas partículas de partido subatómico hasta llegar al súmmum de la democracia: “Un hombre, un voto, un partido”.
Ya decía Gardel que veinte años no es nada. Así que ochenta son cuatro veces nada. Nada de nada de nada de nada. Gracias. De nada.
La Churrería
Hace ya 80 años que España se fue a la cama con el Franquismo. “Esto no es lo que parece”, exclamó al ser sorprendida por la República. Menudo golpe se llevó la pobre.
El 1 de abril del 1939 finalizaba la guerra civil española. Joaquín Sabina se quejaba de que le habían robado el mes de abril, pero a los españoles nos robaron casi cuarenta años desde ese abril.
España acabó cayendo tras el alzamiento cuando pasaron los que no pasarían lanzando vivas a la muerte.
Eran otros tiempos: la campechanía monárquica era campo y la república no era un animal mitológico. Seguramente que si hoy cantamos “¡Rumba la rumba la rum bam bam!” algunos pensarán que es una canción de Peret y otros la BSO del robot aspirador.
Sin embargo, parece que hoy a muchos se les siguen yendo los pies con el ‘Cara al sol’ y levantan el brazo sin intención de parar ningún taxi. Se ve el protoexhumadísimo que lo dejó todo tan atado y bien atado que ahora ya no hay manera de deshacer el nudo.
Y la izquierda sigue tan desunida como entonces, subdividiéndose en pequeñas partículas de partido subatómico hasta llegar al súmmum de la democracia: “Un hombre, un voto, un partido”.
Ya decía Gardel que veinte años no es nada. Así que ochenta son cuatro veces nada. Nada de nada de nada de nada. Gracias. De nada.
La Churrería