Esta historia es para demostrar que muchas cosas son posibles que no todo pasa en un cuento de hadas. Es tu criterio creer o no, yo creo en el amor y si tienes a alguien hay que luchar por él, no será fácil pero vale la pena. Al final de cada lagrima y cada herida crecemos y nos hacemos más fuertes, está en nosotros el aceptar el pasado, vivir el presente y mirar al futuro.