Los judíos y la franc-masonería en el siglo XIX. Un estado de la cuestión

Traducción de un ensayiculo escrito por el historiador Jean-Philippe Schreiber, originalmente titulado
JUIFS ET FRANC-MAÇONNERIE AU XIXE SIÈCLE. UN ÉTAT DE LA
QUESTION

Judíos y Franc-masones en el siglo XIX. Un estado de la cuestión.

La cuestión de la relación entre judaísmo y masonería apenas tuvo menos irrupción en la historiografía de los judíos del siglo XIX como en el siglo de la Ilustración. Conviene, por tanto, bordear los aspectos que ya fueron objeto de investigaciones, a fin de indicar las vías que la búsqueda ahora debería tomar para completar nuestros conocimientos demasiado lagunarios...

...La elegibilidad de los judíos, por supuesto será el objeto de los debates ulteriores pero, a causa del clima general de tolerancia y de compromiso a los principios fundadores de la francmasonería, las logias inglesas aceptan en general a los judíos. Va a ser lo mismo en los Estados Unidos, luego, en el siglo XVIII en numerosos países europeos. Excepto en Alemania...

...La Alemania masónica del siglo XVIII, a imagen del conjunto de la sociedad alemana, está ampliamente opuesta a la admisión de los judíos en nombre del carácter cristiano de la francmasonería. Con una pequeña excepción: la l’Ordre des Brüder Sint-Johannes des Evangelisten aus Asien in Europa, o también llamada FRÈRES ASIATIQUES (Hermanos Asiáticos), primer ensayo para fundar, en Viena en 1780, una orden masónica proponiéndose aceptar a los judíos y cristianos en sus filas. Sus logias son implantadas en Praga, Berlín, Innsbruck, Fráncfort-sur-le-Main y Hamburgo. Siguiendo a la Frères Asiatiques algunos meses después de los eventos revolucionarios parisinos, la (logia) Toleranzloge de Berlín milita abiertamente, ésta también, pero de manera aislada, en favor de la admisión de los judíos...

...La logia Aurore Naissante (que se volverá la Zur aufgehenden Morgenröte) es reconocida desde 1807 por el Gran Oriente gracias a la diplomacia de Max Cerfbeer ; ésta (la Aurore) tuvo como primer venerable maestro (presidente) a un colaborador de los Rothschild: Siegmund Geisenheimer. Los historiadores Jacob Katz y Paul Arnsbergpor mostraron que (esa logia) reunió en su seno prácticamente a todas las grandes familias de la vieja comunidad judía de Fráncfort así como las que conocieron un rápido ascenso – los Hanau, los Goldschmidt, los Rothschild, etc… – en particular sus más jóvenes miembros...

...En 1844 la logia Convent éclectique de Francfort, una de las logias madre no prusianas, autoriza finalmente a los miembros de la Morgenröte a asistir a las reuniones de las logias afiliadas en tanto que visitadores. La mayoría de las logias se pliegan a esta posición, con excepción de las logias místicas y cristianas, éstas mismas más y más marginalizadas con relación a una logia madre abiertamente humanista...

...Al laxismo religioso difuso y a la nítida regresión de la ortopraxis que conocía una parte de la sociedad judía desde la época moderna – en el caso de los sefarditas, pero también en el caso de algunos askenazi, ya así en el caso de algunos judíos de Alsacia en el siglo XVIII – se añade en el siglo XIX una reacción contra la ley religiosa, percibida como arcaica y dogmática. Estos marginales comparten con la franc-masonería una misma inclinación hacia lo universal, acuerdan una misma supremacía de la moral sobre la fe, alimentan una misma voluntad de promover al individuo, la acción social y la filantropía y una misma visión progresista de la sociedad. Además, siguiendo vías variables según que ésta sea espiritualista o materialista, la francmasonería, como algunos elementos del judaísmo liberal – y del protestantismo apunta a una superación de los abismos confesionales para alcanzar una religión o una filosofía única, universal...»