Dedicado a todos los románticos apasionados del amor; al ser sensible y tierno que ha dado su vida por lo que más quiere; al ser que ha traicionado, que no ha sabido ni sabe amar, al amante que dice amar y niega sus emociones, al enamorado que no sabe ni intenta experimentar.
Para todos y cada uno de los que son escépticos ante el amor verdadero y real, para quienes son amantes de la vida en su totalidad y sin temores, para quienes son originales y peculiares en la demostración de sus deseos y emociones; para ellos con toda la razón y sentimiento.
Para aquellos amantes de lo profundo, de lo inmerso en el mundo del rojo pasión, de lo dulce y lo salado, de lo formal y lo abstracto, de lo normal y anormal de los sentires, simplemente para aquellos que aman sin límites.